01 diciembre 2009

EL PUERTO

Recuerdos de Ceuta ( años 1.950-1.960 )


Ceuta y su Puerto son todo uno. En ninguna otra ciudad de nuestra querida España ésta dependencia marítima se hace tan evidente. Ceuta se extiende alrededor de su Puerto, va creciendo y extendiéndose sin perder de vista al mar. El Puerto es el pulmón de nuestra españolísima ciudad.
Su estratégica situación geográfica, suroeste de Europa y noroeste de Africa, convierten a nuestra bella ciudad, en la llave del Estrecho de Gibraltar. En puerta de dos continentes.
Para tener una visión más amplia de la tremenda importancia del puerto ceutí, habría que recurrir a las cifras para ver los buques que recalan y los millones de toneladas de registro bruto que mueven. Sin contar con los miles de viajeros que entran y salen. Su régimen de puerto franco hace que en él recalen barcos de todas las banderas y de todos los paises en busca de precios competititvos en combustible, agua y aprovisionamiento.
Todas las actividades económicas de Ceuta comienzan y acaban en el Puerto. Y para contemplar la belleza, la grandeza y la majestuosidad de nuestro Puerto, tenemos que desplazarnos hasta el Monte Hacho o bien subir a García Aldávez, desde donde se puede contemplar la perpectiva más hermosa del mismo.
Vamos a efectuar un recorrido a pié por nuestro puerto. Vamos a sentir el latir de la vida en cada rincón marinero. Vamos a dejar que el aroma del mar embriague a nuestros sentidos. Iniciamos nuestro recorrido por el muelle de Levante, mas conocido por Muelle Alfau o del Carbón. Situado a la derecha teniendo como norte el Estrecho, éste muelle arranca practicamente de la Playa de San Amaro, formada por grandes guijarros y se adentra en el mar en dirección oeste. Termina en un alto espigón rematado por un pequeño faro, donde una luz intermitente indica a la navegación nocturna la situación de la bocana o entrada al puerto. Altas montañas de negro carbón ( antracita ) ocupan practicamente toda su estructura. Unos pequeños pabellones donde están instaladas oficinas y servicios marítimos ponen la nota de color. Enormes gruas cuya parte superior se asemejan a las tipicas pajaritas de papel, transportan el primordial combustible al interior de las bodegas de los barcos que vienen a repostar. El Muelle Alfau está siempre en constante y visible actividad. En su parte interior al inicio del propio muelle, está permanente atracado un guardacosta de nuestra Marina de Guerra. A su lado, una pequeña, querida y nostálgica embarcación llamada Capitán Parra que anualmente lleva hacia la cercana población de Tarifa a unos peregrinos ceutíes en no recuerdo qué romería. En las instalaciones de éste muelle, se está rodando la película " Puerto África ", con la actriz italiana Pier Angeli. Es todo un acontecimiento en nuestra ciudad, pues son muchos los "caballas" que se desplazan diariamente al muelle para presenciar el rodaje del film. No todos los dias se pueden ver camellos y tanta parafernalia.
Dejamos atrás el muelle subiendo por su amplia rampa de acceso frente a Baeza. Apenas existe circulación y los arcenes permanecen libres facilitando el aparcamiento. A la derecha un viejo y antiguo varadero nos despide. Empezamos nuestro recorrido por el Paseo de la Marina Española que nos trasladará hasta el muelle del Comercio o de Pescadores. Pasamos por una pequeña plazoleta que forma un balcón sobre el mar. Las gaviotas revolotean y se posan en las rocas que con la bajamar quedan al descubierto. El mar llega practicamente hasta la base del Paseo. A la izquierda dejamos la Escuela de Magisterio. Un poco mas adelante, el Patio Páramo, donde vive nuestro buen amigo José Berrocal. Mas adelante la confluencia de la calle Alfau. Pasamos por Casa Constantino López, donde se fabrica el popular chocolate a la taza "La Negrita". Un poco mas adelante, la delegación de otra marca chocolatera, Nestlé, donde solemos los pequeños ir a buscar los cromos que nos faltan de la colección patrocinada por tan renombrada marca chocolatera. Son unos albunes de cromos muy instructivos y vistosos. El primero y mas sencillo fué aquel del famoso negrito del Africa Tropical donde se veía todo el proceso y elaboración del chocolate. Ahora los cromos son mucho mas sofisticados e instructivos. En ellos podemos ver y leer la epopeya de la Kon Tiki; el Sabre, primer avión supersónico o como se construyen los rascacielos de Nueva York.
Proseguimos nuestro recorrido y pasamos junto a la Representación de la Marina. El tipico soldado marinero hace guardia permanente. En la misma acera, dejamos atrás la Imprenta Olimpia y nos encontramos con el Gobierno Militar. A la sombra de reconfortantes árboles, los soldados encargados de la guardia, aguardan entrar en servicio. Todo es un trajín de entrada y salida. Podemos contemplar los distintos colores de los uniformes de nuestro admirado y querido Ejército.
Frente al edificio principal del Gobierno Militar, un pequeño acceso al mar formado por un espolón de piedra y unas toscas escaleras del mismo material y que la inclemencias del tiempo durante muchísimos años han ido deteriorando. Era el lugar reservado para tomar baños de mar al gobernador militar de la plaza. Su acceso está salvaguardado por una vieja, oxidada y deteriorada cancela que impide su acceso libremente y que no obstante no es obstáculo ni impedimento alguno para muchos aficionados a la pesca que acceden al mar por semejante sitio, para buscar y rebuscar en la oscura arena las tan necesarias lombrices o muñecón que más tarde utilizarán como cebo para ejercitar ten relajante como paciente deporte como es la pesca. Hay que aprovechar la marea baja para proveerse de tan estupendo cebo.
Unos metros mas arriba y frente al Gobierno Militar se encuentra el imponente Colegio de San Agustín. Prosiguiendo nuestro recorrido pasamos ante varias agencias marítimas, entre ellas la Agencia Partida donde nos saluda desde lo alto de un camión de transporte el simpático y cariñoso Francisco Ojeda, conocido por todos como Paquirri. Entrañable personaje cuya imitación de Popeye nos hace sonreir a todos.
Unos comercios de efectos navales, cuyos escaparates están repletos de artilugios y objetos necesarios para las actividades marinas y el local Social de Caza y Pesca ponen el punto final al Paseo de la Marina. A la derecha comienzan los Jardines de San Sebastián.

( continuará )

1 comentario:

  1. Hola Ofelio!te sigo porque leyendo tus escritos me remonto a un pasado ya lejano pero lleno de buenos y entrañables recuerdos,en el último piso del edificio de la imprenta Olimpia aprendí a coser con unas modistas muy afamadas "las de Carmona"dos hermanas así apedilladas que cosian a lo mas granado de aquella época, nos enviaban las telas de La casa Gratacós situada en paseo de Gracia BARCELONA que aun existe.En otro apartado (EL PUERTO) dices que no te acuerdas de que romeria se trataba pues yo te lo digo era "La romeria de la Almoraima".Y tambien te comento que siendo muy niña cuando rodaban la película bájabamos a la Marina al lado de la Normal veiamos pasar los camellos.Veo que tienes amistad con Pepe Berrocal si lo ves dale recuerdos de Nina (somos parientes).Saludos Catalina

    ResponderEliminar